La historia imposible de Sebastian Cole está llena de cosas, y preguntas, imposibles, con una trama cargada de imaginación y absurdez. Emma y Oleg se encontrarán de golpe y porrazo en una trama a gran escala sobre organizaciones de cosas imposibles después de que se inventaran un amigo imaginario y éste acabara irrumpiendo en sus vidas de verdad.

La historia es surrealista por todos sus poros, pero se nota que el público al que va dirigido es principalmente infantil porque muchas de las cosas que se resuelven lo hacen porque sí en la mayoría de los casos.

Sin embargo, y precisamente por esto, no quedan cabos sueltos y podemos encontrar finales felices y hace resaltar la historia en sí misma.

Lo mejor de la novela, sin duda, es su manera de acercar ciertos temas a los lectores. Ambos protagonistas son jóvenes con una personalidad fuerte que vienen de hogares con problemas. Padres con depresión y problemas financieros, temas como estos afectan las vidas de los chicos y la novela muestra el impacto que tienen. También se tocan temas como el miedo a crecer y el bullying escolar.

Todo el viaje resulta bastante caótico y espontáneo, aunque ese es parte de su encanto. A pesar de todo, seguro que los jóvenes lectores apreciarán el humor y los mensajes tan bonitos que encierran sus páginas.