Reseña: La extraordinaria familia Telemacus

Título: La extraordinaria familia Telemacus

Autores: Daryl Gregory

Editorial: Blackie Books

Páginas: 542

Precio: 23,90 €

Libro autoconclusivo
Ficha en la web

Teddy Telemacus es un hombre encantador y un encantador de mujeres. Sus poderes se limitan a tener manos rápidas para trucos y cartas, pero le sirven para manejarse en los bajos fondos mafiosos y para conocer a Maureen McKinnon durante un curso experimental de telequinesis organizado por la CIA en plena Guerra Fría. Ella es una asombrosa mujer con superpoderes que se enamora de él a pesar de que adivina cada uno de sus pensamientos. De esta unión, nacen tres niños prodigio: Irene detecta las mentiras, Frankie mueve objetos con la mente y Buddy, el más joven, puede predecir el futuro.

Son la extraordinaria familia Telemacus y con ese nombre triunfan en espectáculos por todo el país y también en shows televisivos de los años setenta. Dos décadas después la familia está en horas bajas. La matriarca falleció y ninguno sabe seguir con su vida. Entonces el hijo de Irene, Matty, descubre que puede salirse de su propio cuerpo cada vez que se excita pensando en alguna chica. La CIA vuelve a llamar a la puerta de esta estirpe. ¿Es eso una buena o una mala noticia? ¿Regresarán los años dorados del clan?

Corre el año 1995. Teddy Telemacus tiene setenta años y es un estafador que vive en Chicago con sus hijos paranormales. Irene, que detecta las mentiras, es incapaz de mantener un trabajo estable; Frankie, telequinético, está metido en problemas con la mafia; Buddy, el vidente, no da explicaciones a por qué está cavando un hoyo enorme en el jardín o cambiando todo lo que es de madera en la casa por metal.
Pero durante todo un año, hace años, cuando la mujer de Teddy, Maureen, estaba viva, eran La Extraordinaria Familia Telemacus. Hasta que una pésima actuación en televisión acabó con su carrera. Atormentado por las historias familiares, Matty, el hijo de Irene, sueña con poder usar su proyección astral para algo útil.

Así da comienzo la premisa de la novela, jugando con las perspectivas de tres generaciones a través del tiempo, mezclándolas con peligros, agentes del gobierno encubiertos, mafias, y relaciones a distancia.

La novela comienza de manera un tanto directa y divertida, con Matty descubriendo que puede salir de su cuerpo mientras se masturba en un armario espiando a su prima, pero luego contrasta un poco con el ritmo que toma la historia. Al tratarse de diferentes perspectivas en diferentes momentos temporales, le cuesta coger ritmo hasta que ha informado al lector de lo importante. Una vez lo hace, toma mejor ritmo y sus tramas se hacen más atrayentes, haciendo destacar las dinámicas familiares de una familia poco convencional.

Otro de los puntos fuertes de la novela es la buena representación de la atmósfera de los 60 hasta los 90 en el libro, yendo más allá que sólo mencionando alguna tecnología puntera de la época o un dibujo animado o película. Además, se juega constantemente con la duda de si las habilidades de los protagonistas son realmente paranormales o tan sólo un fraude, por lo que hasta el más escéptico dudará en algún momento de la historia.
A pesar del bache inicial que se puede tener con la trama, por su ritmo y confusión con las diferentes perspectivas, una vez llegados al final resulta más satisfactorio, quedando además lo suficientemente abierto y lo suficientemente cerrado como para no ser necesaria una secuela.