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Título: Una furia de alas negras
Autor: Alex London
Editorial: Puck
Páginas: 352
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Se alzarán juntos o caerán solos.
El pueblo de Uztar ha mirado el cielo con asombro y esperanza desde tiempos remotos. Nada en su mundo es más venerado que las aves rapaces y nadie es más respetado que los cetreros que las llevan en el puño.
Brysen se esfuerza por ser un gran cetrero, mientras que su hermana melliza, Kylee, posee dones ancestrales pero quiere librarse para siempre de la cetrería. Ya casi lo ha logrado, pero una guerra se aproxima a Seis Aldeas, con un ejército rebelde que no deja nada a su paso, excepto sangre y el cielo vacío. No habrá cetrero ni ave a salvo de esta invasión.
Juntos, los mellizos deben emprender una expedición a las traicioneras montañas, para atrapar a la casi mítica águila fantasma, asesina solitaria y el ave rapaz uztari más temida de todas.
Cada uno va por sus propias razones: Brysen, por el chico que ama y la gloria que tanto anhela; Kyle, para reparar el pasado y proteger el futuro de su hermano. Pero ambos son perseguidos por aquellos que solo buscan una cosa: poder.
Con este libro, Alex London lanza una vertiginosa saga sobre los recuerdos que nos acechan, las historias que nos persiguen y los lazos de sangre entre nosotros.
El pueblo de Uztar ha mirado el cielo con asombro y esperanza desde tiempos remotos. Nada en su mundo es más venerado que las aves rapaces y nadie es más respetado que los cetreros que las llevan en el puño.
Brysen se esfuerza por ser un gran cetrero, mientras que su hermana melliza, Kylee, posee dones ancestrales pero quiere librarse para siempre de la cetrería. Ya casi lo ha logrado, pero una guerra se aproxima a Seis Aldeas, con un ejército rebelde que no deja nada a su paso, excepto sangre y el cielo vacío. No habrá cetrero ni ave a salvo de esta invasión.
Juntos, los mellizos deben emprender una expedición a las traicioneras montañas, para atrapar a la casi mítica águila fantasma, asesina solitaria y el ave rapaz uztari más temida de todas.
Cada uno va por sus propias razones: Brysen, por el chico que ama y la gloria que tanto anhela; Kyle, para reparar el pasado y proteger el futuro de su hermano. Pero ambos son perseguidos por aquellos que solo buscan una cosa: poder.
Con este libro, Alex London lanza una vertiginosa saga sobre los recuerdos que nos acechan, las historias que nos persiguen y los lazos de sangre entre nosotros.
Los gemelos Brysen y Kylee viven con su madre a las afueras. Lo único que quiere Brysen es convertirse en un famoso cetrero y Kylee, todo lo contrario: quiere librarse de la deuda en la que está metida tras la muerte de su padre.
Brysen pasó sus primeros años esquivando sin éxito los puños de su padre, y Kylee ha estado siempre ahí defendiéndole, pero están más distanciados de lo que puede parecer al principio.
Cuando la vida del novio de Brysen parece estar amenazada, éste hará lo que sea por salvarle...Traduciéndose en una misión casi suicida en busca del legendario aguíla fantasma, el mismo ave que mató al padre de los gemelos.
Pero el pueblo está al borde de la guerra y en su camino verán que no están solos. A pesar de sus diferencias, Kylee y Brysen se necesitan el uno al otro más de lo que les gustaría.
Quería que me gustara este libro –tenía una premisa interesante, estaba recomendado por Adam Silvera...–, pero todo comenzó a hacer aguas rápidamente.
El aspecto más importante que hizo flaquear el libro, para mí, fueron sus personajes. Brysen –y esto es algo en lo que parece que mucha gente coincide– es un personaje muuuuuy penco. Siempre haciendo decisiones estúpidas, y su actitud de "chico soñador" constante le hace ser muy insufrible.
Kylee, por el contrario, no era un mal personaje, solo que...un personaje OK. Si acaso, mi queja con ella es que la historia y su mundo parecían poner demasiado empeño en hacernos creer que era alguien especial cuando en el fondo no se diferencia mucho de un personaje secundario más.
Algo que sí me gustó es los elementos que introduce el autor en el worldbuilding. Tiene aspecto de contener muchísima información pero al lector le llega la justa y necesaria para no sentirse abrumado o perdido.
La dinámica con la cetrería y su entrenamiento es interesante, y como idea es incluso fascinante. Sin embargo, puesto en práctica a lo largo de las páginas de esta novela, va perdiendo protagonismo poco a poco y se acaban viendo pinceladas con respecto a la trama.
Quizás si la historia no hubiera empezado tan oscura y en mitad de todo desde el principio, y hubiera sido un cambio gradual conforme se suceden los capítulos, igual habría tenido mejor impacto la historia en conjunto.
Para añadir más inconsistencia al flujo natural de la lectura, nos topamos de vez en cuando con capítulos que no eran las perspectivas de los protagonistas, y rompían la dinámica de la historia porque la mayoría de las veces no añadían nada interesante y creo que el libro podría haber funcionado mucho mejor sin estos capítulos.
A pesar de todo, y pasado el mal trago, queda claro que este debía ser el libro introductorio por excelencia de la trilogía y todo apunta a que las cosas mejorarán en la secuela –sobretodo la personalidad de Brysen–.
Siempre intento que me gusten los libros que leo, al menos lo suficiente, y que las reseñas negativas no son algo común en este blog; pero no he podido sentirme involucrado en la historia en ningún momento, y no sé si el fallo ha sido mío o del libro, pero me ha dejado muy indiferente.
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