Wonder Woman: Pelea como una guerrera, es parte de una saga centrada en personajes icónicos del universo DC, y aporta una visión muy diferente de Diana de Themyscira aka Wonder Woman. Aunque en un marco mitológico típico de la antigua mitología griega y con reminiscencias a Percy Jackson, si esperábais encontrar algo parecido a la película de Patty Jenkins, estrenada el año pasado, os vais a llevar un pequeño chasco, pues el período en el que se desarrolla esta historia, así como todo lo relacionado con las Amazonas, es bastante diferente; aunque sí que hay ciertos paralelismos que hacen que parezca que la novela es un retelling de la película. Esperaba algo más relacionado con la Wonder Woman de los cómics para aprender más sobre este personaje, ya que mis conocimientos sobre el universo DC son escasos.

Una historia sobre el ascenso de la amazona Diana habría sido muy interesante de leer, Leigh Bardugo decide ir más allá creando a Alía, una neoyorquina que naufraga durante un viaje en el mar. Así, esta historia se convierte en la primera vez que Diana explora el Mundo del Hombre, pero no como Wonder Woman, sino como una chica con una misión para ponerse a prueba a sí misma.

Alía es una Warbringer, una descendiente directa de Helena de Troya. Cuando llegan a cierta edad, su sola presencia en el mundo causa conflictos y guerras. Por ello, Diana y Alía trabajarán juntas para llegar al lugar donde la influencia de Alía se neutralice para evitar desastres futuros.

La mitad de la historia está contada desde el punto de vista de Diana, en tercera persona. Desde aquí, observaremos a la chica que algún día formará parte de la Liga de la Justicia pero, por ahora, es solo una chica un poco aislada en un grupo de guerreras altamente cualificadas. No es una igual dentro de las Amazonas de Themyscira, pues no es tan fuerte y rápida como ellas, por o que debe superarse a sí misma.

Leigh Bardugo mezcla mitología con hechos del pasado para crear ciertos conflictos en el futuro, y no sólo la herencia de Alía causa problemas allá donde vaya, pues más adelante veremos cómo dioses malvados se inmiscuyen en la batalla. Al final encontraremos diversos plot twists y una mezcla entre fantasía mitológica y ciencia ficción que aumentan el interés general.

El punto de vista de Diana añade una interesante visión "amazónica" de nuestro mundo moderno, y también veremos la sororidad entre amazonas, mientras que el de Alía aporta una visión sobre la lucha interna sobre las consecuencias que ser Warbringer puede provocar. Una de las cosas que no me convencieron mucho de la novela es que, a pesar de ser un libro YoungAdult, tiene un aire muy MiddleGrade, y más que Wonder Woman, es Wonder Girl (algo que se sabe una vez lees la historia, pero el título de la novela puede inducir a crear otras expectativas).