Prosperity Redding no sólo fue maldecido con un nombre terrible, también le hicieron la oveja negra de la familia durante años. Siempre a la sombra de su hermana gemela, Prudence, nada de lo que Prosper haga parece ser suficiente. Tener doce años, casi trece, no es algo fácil, y si además están constantemente presionándote, crecer se hace algo muy cuesta arriba.

La vida en Redhood no es fácil porque la familia Redding es básicamente la fundadora de la ciudad, por lo que todo lo que haga mal Prosper se magnificaría.
Todo esto ya debería ser suficientemente malo para un chico de tan temprana edad, pero ¿y si descubrieras que tienes dentro a un demonio con el que tus antepasados hicieron un pacto para tener tantas riquezas, y que dicho demonio reclama tu alma?

«Os diría que es un placer conoceros, Prosperity Oceanus Redding, pero sinceramente, ardo en deseos de destruir vuestra felicidad».

No es un secreto que me guste mucho leer novelas MiddleGrade. Pero a veces encuentras alguna que parece que se esfuerza demasiado en hacer que parezca una novela para niños, y el todo se ve forzado; por suerte, Alexandra Bracken consigue que la voz del protagonista de doce años parezca algo natural y no contrasta negativamente con la oscura historia que le rodea.

Este "monstruoso relato" es oscuro, misterioso, con un montón de magia y peligros, y con temas como la amistad y la aceptación en nuevos lugares. Los personajes aprenden a confiar en personas en situaciones donde no se sabe quién dice la verdad y quién no, y la traición parece amenazar en cada rincón. La relación que se forja entre Prosper y Alastor, un maligno que se ha instalado en su cuerpo, es particularmente intrigante, y es lo que más curiosidad me dio ver desarrollarse.

La historia empieza de forma interesante desde el comienzo y, aunque algunas veces lleve un ritmo más lento, es intrigante, curiosa y absorbente en todo momento. Como pasa con las Pringles, una vez que empiezas a leer es muy difícil parar.

Me ha gustado bastante el mundo que ha creado Bracken, y la forma en la que funciona la magia. Los personajes crecen junto con su entorno, y la mezcla de situación contemporánea con magia antigua y lugares históricos dan un resultado bastante interesante y fácil de imaginar gracias al estilo narrativo en las descripciones.
¿Qué es lo peor de este libro? Tener que esperar al siguiente, precisamente por la forma en la que termina.

Entre el 4 y el 4.5