El Último Rebaño es la extravagante historia de un niño que descubre su voz. Con ciertas reminiscencias de El Principito, es una novela que puede ser leída a cualquier edad y tener diferentes significados e interpretaciones.

Kester Jaynes es un niño de doce años que vive encerrado en un lugar para niños problemáticos. No sabe por qué está ahí, solo que hay algo que está mal en él, y no sabe si su padre sabe que está ahí encerrado, o peor aún, si fue su padre quien le envió allí. Kester no habla, no puede hablar, incluso aunque quiera, simplemente no puede. 

En un mundo donde no existen los animales debido a un potente virus que acabó con ellos, un misterioso virus que volvía los ojos de los infectados de un color rojo brillane, Kester se llevará una sorpresa cuando, una noche, escuche una voz en su dormitorio. La voz suena en su cabeza, pero proviene de una cucaracha que le habla.

Cuando pensaba que se estaba volviendo loco de remate, una bandada de palomas irrumpe en su habitación y lleva al niño al último remanso que existe en el mundo donde los animales supervivientes dependen de su ayuda para salvarse de la extinción. 

Dividida en seis partes, El Último Rebaño es una aventura en búsqueda de una cura contra la extinción, con una perspectiva tan diferente, vista desde los ojos de un niño que no sabe nada del mundo exterior, en el que tendrá que lidiar con los peligros que los mismos humanos pueden llegar a representar, no solo los animales salvajes. Una trama cruda, honesta, imaginativa y reflexiva, donde el protagonista aprenderá mucho sobre sí mismo, la amistad, los humanos y los animales. 

El hecho de usar a un protagonista que no puede hablar, que no puede expresarse con otras personas, fue digno de leer; el sentimiento de impotencia al no poder comunicarse apropiadamente incluso con los más cercanos, que no puedan comprenderle, que se sintiera solo.

A lo largo de la novela, Kester conocerá un buen puñado de animales, desde ratones hasta majestuosos ciervos, cada uno con su propia personalidad y cualidades. Por último, acompañando a la narración sencilla y ligera del novel autor, habrá muchos momentos de humor, protagonizado por varios animales, pero también muchos momentos tristes y "oscuros". Si bien la novela no termina con un cliffhanger, quedan problemas por resolver, los cuales estoy deseando conocer.