Ser un Seeker es un honor, una misión, un destino. Quin Kincaid se ha pasado la vida entrenando para serlo y lo ha conseguido. Esta noche hará su juramento, y su familia y su chico estarán orgullosos de ella.
Su futuro parece perfecto, pero justo después de la ceremonia, todo cambia. Ser una Seeker no es lo que creía. Su familia no es lo que creía. Ni siquiera su chico es quien ella creía, y ahora es demasiado tarde para echarse atrás.
Junto con otros compañeros, Quin deberá luchar por una misión distinta a la que se le ha encomendado: encontrar la luz en un mundo sumido en las sombras.
Seeker trata sobre la traición, una novela donde la verdad en realidad es una mentira. Seeker es la historia de Quin, nuestra protagonista, la heroína, quien se entrena para ser una Seeker. Como parte de una antigua familia, será capaz de manejar un mágico artefacto, una vez termine su entrenamiento, que usará para proteger a los demás e impartir justicia. Solo hay un pequeño problema: durante todos estos años, todo lo que Quien ha aprendido y creído sobre su entrenamiento como Seeker es una mentira.
Contada desde las perspectivas de Quin, y sus dos amigos, John y Shinobu (un irlandés oriental pelirrojo, vaya mezcla más rara), y una chica llamada Maud, la novela nos enseña así la forma de ser de cada personaje, qué les mueve, sus fortalezas y debilidades, al tiempo que la trama se va desarrollando.
Tiene un buen comienzo, introduciéndonos un poco el entrenamiento, las pistas que nos hacen pensar que hay algo que va mal entre Quin y Shinobu, John y su familia, y algo de Maud y sus inicios con los Dreads (que no me ha quedado muy claro qué son). Sin embargo, cuando empezamos la segunda parte, en la que hay un lapso temporal de 18 meses, la trama se vuelve rara, con muy poca acción, en la que hay muchas páginas en las que no ocurre nada, y en las que cada personaje pasa un buen tiempo separado del resto en una especie de estado de introspección personal. Llega un momento, en el que cualquiera se hubiera rendido con la lectura, pero al llegar al final, la trama parece recomponerse un poco y reencaminarse en su historia, dejando incógnitas y tramas por resolver que tengo curiosidad por descubrir en el siguiente libro.
La historia cuenta con muchos elementos buenos, acordes al género de fantasía en el que se encuentra (fantasía urbana, en este caso, al estar ambientado en la actualidad en el mundo real), pero mete varios aspectos de otros géneros como la ciencia ficción y el pseudo-steampunk en una mezcla que puede llegar a ser confusa o abrumadora, para los cuales además no da explicaciones de por qué están ahí.
En Seeker, ocurren muchas cosas y es una novela que cuenta con varias subtramas que pueden resultar interesantes, pero que no les ha dado la atención necesaria y se han dado pocas explicaciones al respecto y te deja con muchas dudas y cierta sensación de insatisfacción. ¿Y qué demonios son los Dreads? Y, por favor, si leéis por alguna parte que esta saga está recomendada para fans de Divergente y Los Juegos del Hambre, no le prestéis atención. Un huevo a una castaña, básicamente.
Seeker es un inicio de trilogía bastante introductorio que mezcla muchos géneros y temas. A pesar de tener más altibajos en la historia de lo deseado, el sentimiento general que deja tras haberlo leído es lo bastante bueno como para querer continuar la saga.
Lamento mucho la decepción que te has llevado, pero me alegra enormemente encontrarme con reseñas sinceras que ayudan a otros a no meter la pata, porque yo hubiese caído de cabeza con esta novela de habérmela cruzado, ya que soy fans de las dos series que comentas: Divergente y Los juegos del hambre.
ResponderEliminarUn beso.
Hola!
EliminarLa verdad es que a estas alturas no recuerdo ya nada del libro (así de mal se mantuvo en mi memoria) y es que me llevé tal decepción...
Por lo que parece, la editorial ha abandonado la traducción de la trilogía, porque no han sacado aún la segunda parte (no sé si alegrarme o no xD)
Gracias por pasarte, saludos!