Quisiera comenzar la reseña diciendo que no tenía absolutamente ni idea de qué me esperaba cuando escogí leer El Nido. La sinopsis es escueta pero sonaba interesante, y me sorprendió descubrir lo que la historia escondía conforme leía la novela.

El Nido sigue la historia de Steve, un joven chico con signos de TOC (trastorno obsesivo compulsivo), tiene pesadillas y miedo a las avispas. Comenzó a tener sueños donde hablaba con unas criaturas que él creía que eran ángeles, pero estas criaturas son en realidad algo más...viles.
Como lector tendrás que seguir a Steve en su lucha por seguir a su instinto sobre lo que está bien y lo que está mal, siendo testigos de la batalla interna que sufrirá un niño tan joven como él que trata de adivinar cómo funciona la vida real, qué hay que hacer para poder sobrellevar los momentos difíciles, y la importancia de aprender que no todo es de color de rosa.
El autor nos llevará por un terrorífico viaje que se alimenta de los miedos infantiles, personajes dudosos y padres demasiado trabajadores y cansados que tratan de lidiar con demasiados problemas al mismo tiempo.
Toda la trama parecerá como una pesadilla de la que no puedes despertar, una experiencia en la que Kenneth ha sabido destacar.

A pesar de lo corto que pueda parecer el libro a simple vista, y que no suela ser el tipo de libro que leería normalmente, acabé descubriendo rápidamente que hay demasiadas cosas ocurriendo en la vida de Steve, lo que te saca un poco de la realidad de la historia, que a pesar de ser realismo mágico, ésta está muy alejada de la realidad. Creo que no esperaba encontrar tanta "ciencia ficción" como acabé leyendo; pero eso no es algo malo, ya que esta historia es muy extraña, sorprendente a la par que intrigante. Las mismas veces que pensé "¿pero qué está pasando...?", las mismas que no podía parar de leer, picado por la curiosidad; tenía que saber qué iba a ocurrir.

A esto ayudó mucho el estilo del autor, que fluía a un ritmo correcto y con una prosa más que aceptable, que te atrapa durante todo el camino. Además, contiene diversas ilustraciones en blanco y negro de lo más curiosas.
Si te apetece leer algo diferente que se aleje de tu estilo de novelas, puedes escoger ésta. No es algo normal, eso seguro, pero te mantendrá con el interés y tratando de adivinar el gran todo.
El Nido es una lectura ágil que se lee de una sentada pero que contiene buenos mensajes sobre crecimiento, aceptación y lucha contra tus miedos internos. Los libros infantiles pueden llegar a ser muy extraños, y esta podría ser tu próxima lectura si te gustó Coraline, libros de Holly Black o Donde viven los monstruos.